19 Sep

Tan Lejos Pero Tan Cerca

Publicado por Cat

Tan lejos pero tan cerca. ¿Qué es lo que ha cambiado? Me gustaría tanto saberlo... Lo que se esconde detrás de cada suspiro, de cada mirada, de cada contestación... Te miro y hay veces que no noto que esté ahí, me noto lejos. Muy lejos. Me siento estúpida ya que siento cómo si intentase retener algo que se me escurre como el agua entre las manos... Cómo si intentase retener la.libertad. Me gustaría compartir mis preocupaciones y mis dudas pero, cuando lo hago, a veces pienso: ¿Para qué? Si a veces la reacción lo dice todo, si parece que no importa... No cuento las cosas para obtener consejo, simplemente para intentar abrirme y, en parte, intentar llegar a ti. Me siento impotente. No sé si quién ha cambiado ha sido tú o yo. Recuerdo cada momento dónde era feliz y aún cuando te veo y estoy contigo, eso guardo como si fuera mi mayor tesoro... Cada momento lo guardo con cuidado, encolviéndolo en seda,.para así mantenerlo a salvo. En sí también me siento estúpida por preocupaciones que luego, cuando las comento, parecen ser una tontería, aunque a veces se tienen que hacer ese tipo de preguntas porque són necesarias, ¿no?
No sé si son paranoias mías o simplemente mi mente me quiere jugar una mala pasada o si me está enviando una advertencia. No sé si me estoy comenzando a cerrar.
Lo que siento ha ido creciendo, hasta un momento donde no sé como decirtelo, y no estoy exagerando. Pero no sé para que sirve tener ese sentimiento si parece que no te llega. No voy a llegar al nivel de decirte que te cases conmigo, o vivamos juntos o tengamos hijos. Simplemente con estar o con continuar a tu lado me basta. Y me haría muy feliz. Si pudiera mantener encendida esa llama, o no dejar que caiga el pilar o estabilizar el avión, yo encantada de la vida. Pero no es fácil.
A veces me siento como una niña pequeña. Cuando te pregunto algo sobre una duda que tengo, por dentro me siento temblar, con miedo a tu respuesta. Porque también eres mi juicio final. Han pasado muchas cosas y ahí he podido ver otras tantas. Cuando me intentaste calmar sobre esa duda, lo conseguiste momentáneamente, pero por muchas cosas que se digan, vale más una acción que mil palabras... Muchas veces me siento como un niño con zapatos nuevos. Y otras tantas como una adolescente que mira unos columpios lamentando una pérdida. O que mira un peluche. Pero sigo teniendo miedo. Ya no confío en mi misma. No sé si puedo conseguir todo lo que quiero o deseo. No sé si soy capaz. A veces espero una mirada, una palabra o un gesto que nunca llegará... Me siento como un espejo sucio... No es fácil si sólo una parte aporta. Sé que saldré perdiendo. Y mucho. Pero esta lucha la voy a intentar ganar, aunque sé que ya está perdida. Intento mantenerme fuerte pero caigo. Una y otra vez. Pero me levanto. Aunque esté llena de heridas...
Siento que he perdido algo, pero no sé identificar el qué...
Puede que esté pidiendo ayuda a gritos, pero hay veces,o la mayoría de esas, que prefiero hacer las cosas por mí misma. A veces siento que me apoyo mucho en este sentimiento, que he creado.una dependencia que a lo mejor no debía haberla creado. O puede que simplemente sea demasiado emocional, demasiado sensible y demasiado débil...
A veces no sé que es mejor... Si mirar por mí misma o mirar por los demás...